La elección de carrera es fundamentalmente un tema personal, ya que se tienen en cuenta los gustos, los intereses, la personalidad y el proyecto de vida. Pero existen otros factores relacionados como la influencia familiar, social, cultural y económica que resultan determinantes a la hora de elegir. Una decisión acertada surge de un proceso juicioso de evaluación y la búsqueda de un equilibrio entre aquellos factores que para cada persona y su situación específica son importantes.
¿Quién eres, qué quieres?
Conocerse bien puede ayudarte a contestar «no sé qué estudiar». Saber qué tipo de actividades, lugares, personas te harán sentir motivado es sinónimo de conseguir éxito en lo que emprendas. Muchas personas saben bien para qué son buenas, sin embargo, también es necesario reconocer si eso le permitirá sentirse realizado, sentirse feliz. Una elección de carrera basada solo en los intereses puede ser una elección errada, ya que dichos gustos o intereses, pueden cambiar con el tiempo. Al respecto, estas recomendaciones pueden ayudar:
La percepción que tenemos de nosotros mismos puede ser nutrida a través de la percepción que familiares, amigos y personas cercanas pueden ofrecernos; escuchar su opinión y valorarla puede enriquecer el proceso de decisión.
Responder a la pregunta: ¿para qué soy bueno?, te llevará a reconocer tus habilidades y aptitudes para diferentes campos de aprendizaje; una guía fundamental es el rendimiento específico en las diferentes áreas del bachillerato (ciencias naturales, sociales, matemáticas, idiomas, tecnología).
Estudiar los perfiles de ingreso y el perfil profesional de las diferentes opciones de carrera te dejarán ver el tipo de actividades y contextos futuros a los que te verás enfrentado académica y laboralmente.
Oportunidades y posibilidades
Una vez que la elección de carrera esté definida a partir de los elementos personales, es importante contemplar otro tipo de variables que responderán al: ¿cómo?, ¿cuándo? y ¿dónde? El factor económico, el apoyo de tus padres, la necesidad de trabajar y estudiar al mismo tiempo, el traslado de ciudad, el enfoque de carrera según la universidad, en fin. Algunas de estas preguntas te ayudarán a realizar dicha evaluación: ¿estoy listo para iniciar mi carrera?, ¿en qué universidad estudiar?, ¿en qué jornada?, ¿un programa técnico, tecnológico o profesional?, ¿cómo financiar mis estudios?, entre otros.
Ten en cuenta que las oportunidades y posibilidades actuales perfilan la elección de carrera, sin embargo, no deben ser el factor decisivo.