Estrategias para mejorar la autoestima
La autoestima es la percepción que tenemos de nosotros mismos, de quiénes somos y el valor que le damos a nuestras virtudes y/o defectos, está directamente relacionada con la forma en que nos expresamos e interactuamos en sociedad; muchos factores pueden determinar esta evaluación constante que hacemos de nosotros mismos, la crianza y los rasgos de personalidad son algunos de ellos.
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¿Han notado que para muchos niños/as, adolescentes e incluso adultos es muy difícil expresar sus puntos de vista o dudas delante de sus compañeros?, cuestionar los conceptos o el punto de vista de la figura de autoridad es otra labor ardua para la mayoría; en estas situaciones está muy relacionada la autoestima.
¿Cómo lograr que nuestros hijos/as tengan una adecuada autoestima y esto pueda potencializar su desempeño académico?
Bien, hay que empezar desde muy pequeños, nunca dejó de lado, en mis escritos, la importancia de la estimulación y entre más temprana mucho mejor, es importante que los/as niños/as adquieran habilidades tanto motrices como cognitivas por medio de diversos juegos y actividades; estos ejercicios incluyen contacto con otros pares de diversas edades, en pocas palabras exposición social, esto ayudará al infante a entender que la exposición frente a los demás es cotidiana y que las acciones, información, preguntas, puntos de vista que tienen para brindar son importantes.
Así mismo les reforzará la idea de escuchar, ver y entender al otro así como él/ella ha sido escuchado o visto; lo anterior constituye un primer paso para luchar contra la timidez tan marcada en las actuales generaciones. El miedo a preguntar en clase y a debatir el punto de vista de los profesores está limitando un gran mundo de posibilidades interesantes, en donde los estudiantes pueden encontrar diversidad de intereses.
A medida que el tiempo avanza, y con él las etapas de crecimiento, se debe lidiar con más elementos, aprender a guiar una situación compleja, identificar los gustos y disgustos de los/as hijos/as frente a quiénes son y cómo lucen, el fenómeno del bullying, tan popular por estos días, entre otros.
Situaciones complejas
Si el niño/a tuvo una experiencia poco agradable a partir de hablar en público, si siente que su profesor lo hizo quedar en ridículo por su aporte o pregunta lo ideal es evaluar junto con él la situación ¿de parte de quién recibió la crítica destructiva?, de lo aprendido a lo largo de su experiencia ¿quién habrá obrado mal, él/ella por participar o quien emitió el juicio dañino sobre su aporte?, ¿qué consecuencias traerá encerrarse en sí mismo/a, por ejemplo, no volver a participar o por el contrario enfrentar la situación?.
Inicialmente (en edades tempranas) es importante acompañarlos a enfrentar la situación asistiendo al colegio y exponiendo el caso, más adelante se espera que sean ellos/as mismos/as quienes puedan lidiar con la situación, se acerquen a quien la desencadenó y planteen sus posturas con respeto.
Identificar gustos y disgustos frente a quienes son y como lucen
Aquí es importante la comunicación y apoyo constante a los hijos: conocer sus amistades, actividades que les agrada y que no, temas de interés, identificar cuando están tristes, aburridos, de mal genio o por el contrario felices y radiantes, intentando inferir situaciones que se hayan presentado por las cuales se encuentren en dichos estados; muchas veces, especialmente en determinadas etapas, la comunicación con ellos/as, que se abran y cuenten sus experiencias no es tan sencillo, pero si se es perspicaz y se cuenta con el interés es fácil deducir este tipo de información sin la necesidad que se cuenten mayores detalles.
Se debe guiar el discurso no solo a resaltar los rasgos negativos de sí, con los que no se experimenta comodidad sino hacer una evaluación completa de ellos mismos con defectos y virtudes, y empezar a establecer soluciones para aquello con lo que no se sienten conformes; explicarles que al igual que en la vida cuando algo no nos gusta lo cambiamos o nos alejamos, en este caso no podemos alejarnos, entonces lo mejor es actuar e identificar cómo podemos sentirnos mejor con ello.
Bullying
Si analizamos la situación muchas veces las personas permiten que una burla o comentario inicial se convierta en este fenómeno por no saber responder o actuar frente a estos, porque no se sienten seguros de sí mismos y porque su autoestima permite que les afecte.
Por otro lado están las características de personalidad de las “víctimas”, quienes usualmente se aíslan, cuentan con escaso soporte social y evitan socializar, claro está que esto no es ningún justificador de tal situación y es claro que existen “bromas” o “comentarios” muy crueles pero en primera instancia, si lo miramos con detenimiento, por más solitaria que sea una persona si cuando esta socializa, lo hace de forma segura y confiada, es poco probable que llegue a ser foco de este tipo de acciones.
Por lo anterior se recomienda abordar el tema desde la prevención, desde la crianza, desde la estimulación y desde el refuerzo seguro a cada una de las intervenciones de los/as niños/as para que a futuro no se deba lidiar con este tipo de situaciones, que muy probablemente van a afectar el desempeño académico de quienes se vean involucrados.
En este tema controversial no solo juega un papel importante la víctima sino el victimario, si este último durante su crianza se apoya por medio de un acercamiento optimo hacia la sociedad tanto de expositor como de espectador, podrá entender los dos roles y no presentar conductas abusivas; también si cuando presenta mínimas señales de desarrollar conductas de abuso se evalúa la situación, esta podrá ser corregida a tiempo.
La seguridad y adecuada autoestima le permite a una persona determinar sus metas, visualizarlas y alcanzarlas, ser críticos/as con ellos/as mismos y sus entornos, y establecer relaciones sociales saludables; si nos sentimos bien con quienes somos esto se verá reflejado en lo que hacemos, pueden presentarse muchos inconvenientes, más dentro del logro de un adecuado desempeño académico, pero si el individuo cuenta con una buena autoestima lo demás se puede potencializar con entrenamientos en las áreas que necesite y con la adquisición de buenos hábitos. En IPLER les enseñamos cómo hacerlo. Te puede interesar el siguiente artículo: Entérese por qué su hijo no tiene un buen rendimiento académico.
